La segunda ecografía, también conocida como «morfológica», es la más importante de las tres que se practican en la seguridad social, pues es más pormenorizada y en ella ya se pueden valorar más aspectos que en la primera. En concreto, esta segunda ecografía se centra en la anatomía fetal (medidas y morfología) y es tan detallada que puede ayudar a determinar ciertas anomalías en el desarrollo del bebé.
¿Qué se valora en la segunda ecografía del embarazo?
- el latido cardíaco
- los movimientos del bebé
- sus órganos internos
- el nivel de líquido amniótico
- el funcionamiento de la placenta y del cordón umbilical
- el sexo del bebé
¿Cuándo se practica?
Se suele llevar a cabo entre las semanas 18 y 22 del embarazo.
¿Qué sucede si se diagnostica una malformación del bebé?
En caso de diagnosticarse alguna malformación, los padres son informados sobre el pronóstico de la anomalía y las pruebas existentes para concretar el diagnóstico, como analíticas, resonancia magnética, amniocentesis o ecografías más detalladas. En los casos más graves, la legislación española contempla la interrupción del embarazo como una posibilidad legal.
¿La ecografía morfológica es cien por cien fiable?
No. Se ha de tener presente que no es posible identificar ciertas malformaciones a través de ecografías. También puede suceder que algunas alteraciones se produzcan más adelante, por lo que esta segunda ecografía no puede detectarlas.
¿Es innocua?
Como todas las ecografías, esta prueba rutinaria del segundo trimestre no implica ningún riesgo. Sin embargo, los especialistas consideran que, si el embarazo no es de riesgo, con tres ecografías es suficiente para valorar el desarrollo uterino del bebé.
